La dinámica del crecimiento económico mundial en 2022 ocurrió en un entorno de recuperación, tras la pandemia de la crisis sanitaria del Covid-19, el conflicto bélico de Rusia-Ucrania y la aplicación de sanciones económicas y financieras por parte de Europa y Estados Unidos; en ese complejo escenario internacional que continuó deteriorándose durante todo el año, la actividad económica de América Latina y el Caribe registró una tasa de crecimiento superior a la esperada en el primer semestre del año, mientras que para el segundo experimentó una fuerte desaceleración en su ritmo de actividad en donde además prevalecieron elevadas tasas de inflación y un endurecimiento de la política monetaria.

Frente a este escenario, se presenta la Iniciativa de Ley de Ingresos para el Ejercicio Fiscal 2024, que es el instrumento jurídico que establece anualmente los ingresos que el Gobierno del Estado estima percibir mediante los siguientes conceptos: impuestos, derechos, productos, aprovechamientos, participaciones y aportaciones federales, así como de recursos provenientes de convenios y subsidios, entre otros, que en suma serán destinados a cubrir las erogaciones estimadas en el Presupuesto de Egresos para el cumplimiento de las metas y objetivos planteados.

Tras lo anterior, en la Iniciativa se presenta de manera detallada la información de los ingresos que se proyectan percibir para el Ejercicio Fiscal 2024; asimismo se incorporan los riesgos relevantes para las finanzas públicas, los cuales están vinculados con los principales choques externos: la elevada y persistente inflación, las repercusiones de la guerra entre Rusia y Ucrania, así como la posible desaceleración en los Estados Unidos de América.