Page 21 - 2. Proyecto de Presupuesto de Egresos, Ejercicio Fiscal 2024
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Gobierno del Estado de Puebla
En contraste, la reducción se da principalmente en bienes duraderos. Evidencia de ello es que el
comercio de Enseres domésticos, electrónicos y artículos de decoración, junto con el de Vehículos de
motor, están teniendo un comportamiento mayormente contractivo. De acuerdo con algunos
indicadores de la confianza del consumidor, el rubro que mide los planes para comprar un automóvil
nuevo o usado en los próximos dos años, creció 0.4 puntos de enero a septiembre, mientras que las
expectativas sobre comprar, construir o remodelar una casa avanzaron 0.4 puntos en el mismo lapso,
los aumentos más bajos entre los subíndices.
Esto muestra que, el comprador se encuentra cauteloso de gastar en bienes que impliquen tener
asegurada una fuente de ingreso. Estos cambios y el comportamiento que llegue a experimentar el
consumo serán determinantes en la economía, en vista de que, diversas instituciones, como la CEPAL,
proyectan un deterioro en el Consumo privado como resultado de las restricciones al crédito que se
derivan de la política monetaria actual.
Inflación
La inflación general anual, después de haber mostrado un incremento sostenido desde inicios del
2021, alcanzó un punto de inflexión en el último trimestre de 2022, de octubre a diciembre de ese
año descendió de 8.41 a 7.82 por ciento. Esto se debió, en gran parte, por la disminución en su
componente No subyacente, vinculado a la reducción de los precios de los alimentos y la energía a
nivel mundial desde meses anteriores. Por su parte, la inflación Subyacente dio su primera señal de
descenso en diciembre, al ubicarse en 8.35 por ciento, tras veintitrés meses de aumentos
consecutivos.
El trayecto a la baja de la inflación ha continuado en 2023, de enero a septiembre pasó de 7.91 a 4.45
por ciento. Sus dos principales componentes continuaron acotándose, aunque el No Subyacente ha
predominado. En los meses mencionados se redujo de 6.32 a 0.60 por ciento, mientras que el
Subyacente, de 8.48 a 5.76 por ciento (ver gráfico 5). La moderación de efectos derivados de la
pandemia y del conflicto Rusia – Ucrania, que han permitido un mejor funcionamiento de las cadenas
de suministro y el retorno de los precios de las materias primas a sus niveles prepandemia, han
favorecido este proceso.
Aun cuando la inflación Subyacente ha disminuido, permanece por encima del promedio histórico de
2000 a 2020 (4.12 por ciento). Esta persistencia, además de la moderación de los choques externos,
ha respondido a factores internos: las distorsiones en la formación de precios por mayores
expectativas de inflación, las presiones de demanda por una reanudación plena de las actividades
presenciales, el traspaso de los mayores costos de los insumos a los precios de venta conforme se ha
recuperado la demanda y las revisiones salariales, junto con los efectos rezagados de dichos
fenómenos.
Entre sus componentes, Mercancías y Servicios, la primera acumula diez meses con reducciones,
mientras que la segunda no ha mostrado un punto de inflexión. Respecto a las Mercancías, la inflación
en Alimentos y bebidas sobresale porque su reducción ha sido más rápida que la de Mercancías no
alimenticias, en los nueve meses transcurridos del 2023, han acumulado una disminución de 6.56 y
3.09 por ciento, respectivamente. Reflejo de la mejoría en las cadenas de producción y la gradual
reducción en el precio de insumos. No obstante, aún se mantienen en niveles elevados.
Adicionalmente, la inflación en Servicios, aún no registra un punto notable de inflexión al mantenerse
por arriba del 5.00 por ciento anual durante los últimos catorce meses (5.35 en promedio); además
de que se ha visto afectada por el incremento en el rubro de educación, debido a la normalización de