Page 15 - 2. Proyecto de Presupuesto de Egresos, Ejercicio Fiscal 2024
P. 15
Gobierno del Estado de Puebla
2. Entorno Económico Nacional
2.1. Evolución de la economía mexicana 2023
Producción
En 2022 el desempeño del PIB fue positivo, aunque contrastante entre sus componentes. El avance
de unos fue minimizado por el retroceso de otros, generando una trayectoria de caídas y alzas
intercaladas en los agregados, dando cuenta del entorno de incertidumbre aún vigente. En el primer
semestre, la producción se caracterizó por su resiliencia, la cual comenzó a diluirse en meses
posteriores dada la pérdida de dinamismo en la demanda externa en virtud de la prolongación de
políticas monetarias restrictivas y la desaceleración de economías con mayor peso global.
La resiliencia antes mencionada descansó, principalmente, en la Industria manufacturera, pues
además de que se benefició de menores presiones en las cadenas de suministro, su crecimiento de
3.8 por ciento, en el primer semestre, propició un impulso a sectores que se le relacionan, tal es el
caso del Comercio al por mayor y los Servicios de transporte, quienes crecieron 5.4 y 6.0 por ciento
en el mismo periodo. También en una mayor actividad turística, pues los Servicios de esparcimiento
y Servicios de alojamiento temporal se posicionaron como las de mayor avance junto con Información
en medios masivos, con aumentos de 13.3, 9.1 y 10.1 por ciento, en ese orden.
Sin embargo, en los últimos dos trimestres de 2022 la debilidad de la demanda externa se hizo más
notable, ocasionando una pérdida de dinamismo en los principales motores del PIB. A saber, las
Industrias manufactureras, con un incremento porcentual de 0.2 al cierre del año, su menor tasa en
todo el 2022, y el Comercio al por mayor, con una caída de (-)1.6 por ciento, su mayor retroceso desde
el choque pandémico. En contraste, los Servicios de esparcimiento continuaron elevándose, 22.7 por
ciento en el segundo semestre y, a pesar de que su participación es menor, fueron de los principales
impulsores de las actividades terciarias.
En consecuencia, el PIB creció 3.9 por ciento en 2022, luego del 6.1 en 2021, aunque resultó superior
a las expectativas de organismos como el FMI (2.1 por ciento) y el BM (1.8 por ciento), publicadas en
octubre de ese año, se debe tener presente que las proyecciones han tenido mayor margen de
imprecisión debido a la evolución de las condicionantes externas, por lo que dicha cifra no implica un
desempeño positivo generalizado, puesto que el comportamiento sectorial divergente se ha vuelto
una característica común en los tres últimos años.
Los vaticinios de diferentes organismos de que continuaría una demanda externa de bajo dinamismo
se han materializado conforme la actividad económica y el comercio mundial resultan menores a los
niveles de 2022. En 2023, el PIB tuvo un crecimiento trimestral de 0.8 por ciento para el primer y
segundo trimestre (ver gráfico 2). Es preciso mencionar que la dinámica de bajo crecimiento es un
fenómeno global. Y si bien, el ritmo de México se mostró tenue en el primer semestre, de acuerdo
con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), fue uno de los tres países que
inició el 2023 con una tasa anual de crecimiento positiva, junto con Brasil y Paraguay, aunque prevé
un avance menor para todas las subregiones de América Latina y el Caribe.
La cifra del PIB, antes citada, estuvo sustentada en las actividades terciarias, apoyadas, a su vez, por
factores internos como la recuperación de los ingresos, del empleo y el consumo. A esto también
contribuyó el sector de la Construcción, pues de no haber crecido 8.9 por ciento en el primer semestre,
las actividades secundarias habrían tenido un desempeño menor, ya que las manufacturas
retrocedieron. De forma específica, la actividad económica observó lo siguiente: